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Publicado: 31/05/2017
Como mayoristas de bellas artes del Eixample de Barcelona, vamos a dar un repaso para ti al recorrido de los pigmentos a lo largo de la historia.
El pigmento es uno de los elementos básicos de la expresión artística. Se trata de una serie de sustancias con capacidad tintórea que obtienen su color al absorber selectivamente la luz y variar así el espectro de luz reflejada, que definirá su tono visible. Nuestra relación con los pigmentos es directa por nuestro trabajo de mayoristas de bellas artes del Eixample de Barcelona, pero hace miles de años que el ser humano se sirve de estas sustancias para expresarse por medio del arte.
La mayoría de pigmentos de uso artístico es colorante seco, habitualmente en forma de polvo fino, al que se adiciona un elemento aglutinante que lo cohesiona y mantiene fijo al soporte.
Los pigmentos pueden ser naturales, obtenidos principalmente a partir de un elemento mineral o natural, o sintéticos, que nacieron tras la Revolución Industrial para aumentar la oferta de los escasos y costosos pigmentos naturales.
Hay vestigios que apuntan a que hace unos 350000 años ya se utilizaban pigmentos naturales como el ocre o los rojizos óxidos de hierro. Con el paso del tiempo se fueron añadiendo tonalidades, siempre recurriendo a orígenes minerales o biológicos y ocasionalmente botánicos, pero la paleta seguía siendo reducida y la producción, muy cara. Colores como el azul ultramar (obtenido de la lapislázuli) y el púrpura de Tiro (del murex), así como el carmín que importaron desde la América postcolonial eran colores reservados para grandes encargos por su elevadísimo coste.
A partir del siglo XVIII, con los avances industriales y científicos, se han ido incorporando numerosos pigmentos sintéticos, que han ampliado la gama cromática y abaratado su precio.
En Artyman Madrid contamos con un extenso surtido de pinturas y demás material artístico para seguir escribiendo la historia del arte.